El anuncio por medio de un simple comunicado fechado el 2 de febrero de 2020 del envío al Sahel de 600 militares franceses suplementarios (con lo que la cantidad de fuerzas de la Operación Barkhane asciende a 5.100 soldados) ha suscitado poco debate y, menos aún. oposición. Ninguna iniciativa militante ha acompañado al anuncio a pesar de que desde 20131 France Insoumise o en la misma época el PCF plantearon explícitamente la necesidad de aclarar los objetivos de guerra de Francia en la región. Por ejemplo, el comunicado del Colectivo África del PCF fechado el 29 de noviembre de 2019 afirma que «la respuesta militar es un fracaso»2. Las diferentes organizaciones de la llamada «extrema izquierda» también han denunciado la presencia francesa en África Occidental. Por consiguiente, nos encontramos en una situación de «denuncia sin acción» en el mismo momento en el que en varios países de la zona se producen manifestaciones populares para exigir la salida de las tropas francesas.