EWylXzeWsAwx2wy

Jazar­pe­na­ri bidea itxi, aska­ta­sun poli­ti­koak borro­ka­tu /​Pare­mos el abu­so poli­cial, luche­mos por las liber­ta­des políticas

[wpdm_​package id=“118725” template=“5c51ba687615d”]

Hoy es Pri­me­ro de Mayo, Día Inter­na­cio­nal de la Cla­se Tra­ba­ja­do­ra. En este día que han que­ri­do con­ver­tir nues­tra con­de­na en cele­bra­ción, quie­nes arras­tra­mos las cade­nas que nos opri­men sabe­mos que hoy solo pue­de ser un día de lucha, aun­que nos hayan ence­rra­do en casa. Por ello, debe­mos denun­ciar la situa­ción actual de la cla­se tra­ba­ja­do­ra y reafir­mar­nos en la nece­si­dad de poner los cimien­tos para su emancipación.

Como han hecho otras ini­cia­ti­vas en todo Eus­kal Herria, des­de esta diná­mi­ca hemos remar­ca­do que vivi­mos una ofen­si­va de la bur­gue­sía con­tra el pro­le­ta­ria­do, que se ha agra­va­do en la situa­ción gene­ra­da por la emer­gen­cia sani­ta­ria. En ese sen­ti­do, la cri­sis sani­ta­ria ha ace­le­ra­do una cri­sis que se ave­ci­na­ba y que empeo­ra las con­di­cio­nes de vida y de tra­ba­jo de la cla­se tra­ba­ja­do­ra. La ofen­si­va, ade­más de ser eco­nó­mi­ca, es polí­ti­ca; y la oli­gar­quía inter­na­cio­nal ha dise­ña­do un plan maca­bro en el que por ejem­plo, mien­tras quie­ren impo­ner­nos la obe­dien­cia, con­vier­ten en nor­ma que aplau­da­mos cada tar­de nues­tras pro­pias miserias.

Bajo el para­guas de la lega­li­dad están espian­do digi­tal­men­te nues­tros movi­mien­tos; en los sitios don­de no lle­gan las fuer­zas poli­cia­les han impues­to la vigi­lan­cia entre noso­tras; en la calle nos inte­rro­gan, humi­llan y abu­san, has­ta el pun­to de ase­si­nar­nos por salir a la calle en algu­nos paí­ses. Al fin y al cabo, uno de los ros­tros más bru­ta­les de esta ofen­si­va es el abu­so poli­cial; es decir, la impu­ni­dad de las fuer­zas repre­si­vas, como bra­zo arma­do de la bur­gue­sía, de hacer­nos lo que quie­ran. Ade­más, para debi­li­tar­nos aún más polí­ti­ca­men­te ante la situa­ción que se ave­ci­na, nos han supri­mi­do las ya esca­sas liber­ta­des polí­ti­cas que tenía­mos; y aho­ra que cada par­ti­do polí­ti­co quie­re estam­par su fir­ma en el dise­ño de la «nue­va nor­ma­li­dad», nadie habla de los dere­chos de reu­nión o de mani­fes­ta­ción, entre otros.

Si que­re­mos tener la capa­ci­dad de dete­ner la ofen­si­va con­tra el pro­le­ta­ria­do, es impres­cin­di­ble con­se­guir con­di­cio­nes para la orga­ni­za­ción polí­ti­ca. Sin embar­go, la bur­gue­sía no nos rega­la­rá lo que para noso­tros es una nece­si­dad de pri­mer orden; y por tan­to, este Pri­me­ro de Mayo en el que el futu­ro del pro­le­ta­ria­do pin­ta tan oscu­ro, debe­mos rei­vin­di­car la nece­si­dad de rom­per el cer­co del esta­do de excep­ción y orga­ni­zar­nos para luchar por nues­tros obje­ti­vos políticos.

1 de mayo de 2020

JAZARPENARI BIDEA ITXI

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *