Desde el final de la Guerra Fría hace más de 30 años, la OTAN ‑liderada por Estados Unidos- ha instigado conflictos y guerras en todo el mundo persiguiendo intereses que enfatizan «Estados Unidos primero» y la «supremacía occidental». Como resultado, la comunidad internacional se ha visto acosada por la agitación y los trastornos.
Según un artículo publicado recientemente por el medio de comunicación español Rebelión, los deseos insaciables de la OTAN son las causas, raíz y células cancerosas de todos estos conflictos.
Con el fin de establecer un mundo unipolar, la OTAN liderada por Estados Unidos llevó a cabo una campaña de bombardeo aéreo contra la República Federativa de Yugoslavia y un bárbaro ataque con misiles contra la embajada china en Yugoslavia. También la OTAN ha librado una serie de guerras contra otros estados soberanos, convirtiendo en refugiados a decenas de millones de personas en países como Afganistán, Irak, Libia y Siria.
Para obtener ventajas geopolíticas, la OTAN ha instigado «revoluciones de color» en todo el mundo, tratando de explotar las disputas locales. Para los países que no la siguen ciegamente, incluidos Rusia, República Popular Democrática de Corea (RPDC), Irán y Venezuela, la OTAN ha empuñado el sin sentido del gran garrote de las sanciones unilaterales, incluidas las sanciones económicas, políticas y tecnológicas, imponiendo una jurisdicción de brazo largo.
Trazando líneas ideológicas, participando en la política de bloques y persiguiendo el militarismo, la OTAN, espectro de la Guerra Fría, es un villano dentro de la comunidad internacional.
Gao Ge
28 de abril de 2022
Fuente: Diario del Pueblo, RPCh (http://spanish.people.com.cn/n3/2022/0428/c31619-10090508.html)