Deten­cio­nes masi­vas para aplas­tar la revuelta

En la mayo­ría de las ciu­da­des la revuel­ta de una par­te de la juven­tud solo ha encon­tra­do como res­pues­ta los gases lacri­mó­ge­nos, los ata­ques de la poli­cía, las deten­cio­nes, la ocu­pa­ción poli­cial de sus barrios, las ame­na­zas, los ata­ques de gru­pos de la extre­ma dere­cha, etc. Los repre­sen­tan­tes loca­les y nacio­na­les bri­llan por su ausen­cia. Lo máxi­mo que lle­gan a expre­sar es su pesar por el ase­si­na­to de Nahel, pero con­de­nan la res­pues­ta de una juven­tud har­ta de su situa­ción de opre­sión y repre­sión, de los ase­si­na­tos de jóve­nes en manos de la policía.

Des­de hace cua­tro noches se lle­van a cabo deten­cio­nes masi­vas en toda Fran­cia, en un inten­to de fre­nar la olea­da de indig­na­ción con­tra la vio­len­cia poli­cial. Según cifras del Minis­te­rio del Interior:

• Duran­te la segun­da noche, del miér­co­les al jue­ves: 150 detenciones
• Duran­te la ter­ce­ra noche, del jue­ves al vier­nes: 875 detenciones
• Duran­te la cuar­ta noche, del vier­nes al sába­do: 1.311 detenciones
• Duran­te la quin­ta noche, de sába­do a domin­go: 719 per­so­nas detenidas
• En total, 3.055 per­so­nas fue­ron dete­ni­das, a veces vio­len­ta­men­te, a menu­do al azar, por­que se encon­tra­ban en una zona don­de la poli­cía esta­ba inter­vi­nien­do, o cer­ca de una ven­ta­na rota. Al mis­mo tiem­po, la poli­cía está iden­ti­fi­can­do a per­so­nas a par­tir de vídeos publi­ca­dos en Snapchat.

Ya se han cele­bra­do dece­nas de jui­cios suma­rios, con penas de pri­sión como ejem­plo, sin nin­gu­na prue­ba. El sis­te­ma judi­cial está pro­lon­gan­do la vio­len­cia de la poli­cía, lle­van­do a cabo su tra­ba­jo con­tra los pobres y los rebeldes.

Si has sali­do a la calle en las últi­mas noches, borra las imá­ge­nes de tu telé­fono y de tus redes si has difun­di­do algu­na. Lo ideal es que sal­gas sin tu telé­fono si te estás mani­fes­tan­do. Se están des­ple­gan­do impor­tan­tes medios de inves­ti­ga­ción, así que des­haz­te de la ropa que lle­va­bas y de cual­quier cosa que pue­da iden­ti­fi­car­te. Si te detie­nen, no digas nada: esto solo pue­de ser­vir para incri­mi­nar­te a ti o a otros. Exi­ge un abo­ga­do y que te vea un médi­co. Nié­ga­te a com­pa­re­cer inme­dia­ta­men­te ante el tribunal.

Como duran­te los Cha­le­cos Ama­ri­llos, con miles de deten­cio­nes tras el Acto 3 de diciem­bre de 2018, o duran­te las mani­fes­ta­cio­nes noc­tur­nas que siguie­ron al 49 – 3 el pasa­do mar­zo y más de 1.000 deten­cio­nes poli­cia­les en cua­tro noches, la revuel­ta solo se con­tie­ne con reda­das a gran esca­la. La úni­ca res­pues­ta de Macron a las rei­vin­di­ca­cio­nes de jus­ti­cia social, con­tra el racis­mo o la vio­len­cia poli­cial, son las deten­cio­nes masivas.

Más de 30 comi­sa­rías de poli­cía y 11 cuar­te­les de la gen­dar­me­ría han sido ata­ca­dos o que­ma­dos, la cor­te de Cré­teil fue alla­na­da, miles de incen­dios y dis­tur­bios en todo el país jun­to con saqueos masi­vos de super­mer­ca­dos y cen­tros comer­cia­les. Vía: Ste­ven Belz

Las auto­ri­da­des fran­ce­sas des­plie­gan blin­da­dos en Mar­se­lla.
ttps://twitter.com/i/status/1675577456332349442

Como ya había­mos infor­ma­do, gru­pos de extre­ma dere­cha se han oga­ni­za­do para ata­car las mani­fes­ta­cio­nes, por ejem­plo en Lorient, en el nor­te del Esta­do fran­cés, un gru­po de 20 – 30 per­so­nas enca­pu­cha­das han pro­ce­di­do a rea­li­zar deten­cio­nes vio­len­tas. Se auto­de­no­mi­nan «bri­ga­das anti alborotadores».

Jean Mes­siha, que ha ase­so­ra­do suce­si­va­men­te a Mari­ne Le Pen y a Éric Zem­mour, ha lan­za­do un fon­do de apo­yo al poli­cía inves­ti­ga­do por el ase­si­na­to de Nahel, afir­man­do que «había hecho su trabajo».

Hay rumo­res en el Esta­do fran­cés de que algu­nos de los incen­dios y daños mate­ria­les duran­te los dis­tur­bios fue­ron pro­vo­ca­dos por los pro­pios pro­pie­ta­rios para obte­ner un segu­ro, ya que en las con­di­cio­nes de la cri­sis eco­nó­mi­ca se verían ame­na­za­dos de rui­na total.

2 de julio de 2023

Datos reco­gi­dos de diver­sas fuen­tes y reco­pi­la­dos por Boltxe.