Las revueltas que han tenido lugar en el Estado francés no solo ha acabado con miles de detenidos, cientos de heridos, sino que además dos personas han muerto y un joven se encuentra entre la vida y la muerte.
En el Estado francés han tenido lugar grandes revueltas después de que un joven de 17 años, Nahel, hubiera sido asesinado a quemarropa por la policía. A lo largo de estos días muchas personas han resultado heridas, detenidas y actualmente son juzgadas en juicios rápidos y condenadas a penas importantes. Pero no solo eso, al menos dos personas han muerto entre los manifestantes y una tercera se encuentra entre la vida y la muerte.
En Guyane, un hombre murió después de ser alcanzado por una bala perdida cuando se encontraba en la terraza de su piso. Esta persona había estado observando desde su casa los enfrentamientos entre los manifestantes y la policía en relación con la muerte del joven Nahel.
En la noche del sábado 1 al domingo 2 de julio, un joven de 27 años murió en Marsella, al parecer por «un violento impacto en el tórax» causado por un proyectil de tipo «flash-ball». Este impacto le provocó una parada cardíaca y murió en un corto espacio de tiempo.
Un joven de 25 años se encuentra entre la vida y la muerte tras ser recibir el impacto de un cartucho de «bean bag» en la cabeza, un tipo de munición que contiene trozos perdigones de plomo y que utiliza la policía. El disparo lo realizó un policía del RAID (unidad de élite de la policía francesa) en Mont-Saint-Martin, suburbio de Longwy. Desde entonces, el joven se encuentra en cuidados intensivos en el departamento neurológico del hospital de Arlon, entre la vida y la muerte.
Según su familia y amigos, Aimène Bahouh, de 25 años estaba con unos amigos suyos en una salida nocturna cuando decidieron ir a aprovisionarse a un surtidor de Luxemburgo, a 5 kilómetros de distancia. Aimène conducía el coche, y por el camino dio media vuelta porque alguien del coche se había olvidado los cigarrillos. Fue entonces cuando el conductor, que llevaba la ventanilla bajada, fue alcanzado por una bala. El abogado de la familia, Yassine Bouzrou, que también es el abogado de la familia de Nahel, declaró que se presentaría una denuncia por «tentativa de homicidio voluntario». Los vecinos de la zona relatan una noche «terrorífica» en la que el RAID «disparaba a todo» desde posiciones ocultas entre los arbustos. Un residente filmó una escena en la que se ve a tres coches circulando a baja velocidad, y luego al RAID disparando en su dirección.
7 de julio de 2023
Texto escrito por Boltxe a partir de informaciones recogidas de diferentes fuentes.