«El sionismo es el hijo del imperialismo de Estados Unidos, si Estados Unidos dejase de subvencionarlo, su Estado se hundiria mañana. El sionismo no tiene nada que ver con la religión, no conquistaron Palestina con la Torá, la conquistaron con el fusil que les pasó el imperialismo.»Kwame Turé, primer ministro de los Panteras Negras y lider panafricanista.
Gustavo Petro no descarta romper relaciones diplomáticas con «Israel»
Las relaciones entre Colombia y la entidad sionista se han deteriorado en el contexto de la mortífera ofensiva contra la Franja de Gaza que ha costado la vida a cerca de 3.000 palestinos y ha dejado cerca de 10.000 heridos.
Todo comenzó cuando el presidente colombiano, Gustavo Petro, criticó los comentarios del ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, quien había justificado «el asedio completo» de Gaza por el hecho de que «Israel» está luchando contra «animales humanos».
Escribió: «Esto es lo que dijeron los nazis sobre los judíos. El pueblo democrático no puede permitir que el nazismo se restablezca en la política internacional. Los israelíes y los palestinos son seres humanos sujetos al derecho internacional».
Según los medios israelíes, Petro publicó más de cuarenta mensajes dirigidos a israelíes y palestinos uno tras otro.
Estos intercambios continuaron cuando el embajador Dagan, en una radio local, «invitó» a Petro «a visitar el museo Yad Vashem. También podemos parar en Polonia y visitar el campo (…) de Auschwitz».
«Ya fui al campo de concentración de Auschwitz y ahora veo que se replica en Gaza», respondió Petro en X.
El domingo 15 de octubre, «Israel», uno de los principales proveedores de armas del ejército colombiano, anunció que «interrumpía sus exportaciones de seguridad» a Bogotá.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel, Lior Haiat, afirmó que la embajadora de Colombia en la entidad sionista, Margarita Manjarrez, había sido convocada tras las «declaraciones hostiles y antisemitas» de Petro, acusando al presidente colombiano de «expresar apoyo a las atrocidades cometidas por los terroristas de Hamás y alimentar el antisemitismo».
En respuesta, Petro declaró que su país no apoya el «genocidio». «Si tenemos que suspender nuestras relaciones con “Israel”, las suspenderemos», dijo.
«El Estado de “Israel” es una cosa y la religión judía es otra, así como el Estado colombiano es una cosa y la religión católica otra», publicó Petro en Twitter en 2019. «Confundir Estado y religión es característico de una mentalidad arcaica. El Estado de “Israel” discrimina a los palestinos como los nazis discriminaron a los judíos».
Una última noticia informa que Colombia ha expulsado del país al embajador de «Israel».
Las fuerzas israelíes dispararon contra sus propios civiles, dice un sobreviviente del kibutz
Una mujer israelí que sobrevivió al ataque de Hamas contra los asentamientos cerca de la frontera de Gaza el 7 de octubre dice que civiles israelíes fueron «sin duda» asesinados por sus propias fuerzas de seguridad.
Sucedió cuando las fuerzas israelíes entablaron feroces tiroteos con combatientes palestinos en el Kibbutz Be’eri y dispararon indiscriminadamente tanto contra los combatientes como contra sus prisioneros israelíes.
«Eliminaron a todos, incluidos los rehenes», dijo a la radio israelí. «Hubo fuego cruzado muy, muy intenso» e incluso bombardeos de tanques.
La mujer, de 44 años y madre de tres hijos, Yasmin Porat, dijo que antes de eso, ella y otros civiles habían sido retenidos por los palestinos durante varias horas y tratados «humanamente». Había huido de la cercana rave «Nova».
En las redes sociales ha estado circulando una grabación de su entrevista, del programa de radio Haboker Hazeh («Esta mañana») presentado por Aryeh Golan en la emisora estatal Kan.
La entrevista ha sido traducida por The Electronic Intifada. Puedes escucharlo con subtítulos en inglés en este video y hay una transcripción al final de este artículo:
Cabe destacar que la entrevista no está incluida en la versión online de Haboker Hazeh del 15 de octubre, episodio en el que aparentemente se emitió. Es posible que haya sido censurado debido a su naturaleza explosiva.
El relato de Porat socava la versión oficial de Israel de asesinato deliberado y sin sentido por parte de los combatientes palestinos.
Aunque ya no aparece en el sitio web de Kan, hay pocas dudas sobre la autenticidad de la grabación.
Al menos una cuenta en hebreo publicó parte de la entrevista en Twitter, ahora oficialmente llamada X, y acusó a Kan de funcionar como «medio de comunicación al servicio de Hamás».
España se une al genocidio perpretado por «Israel»
Según informes, la fragata Méndez Núñez (Fuerza naval de España) estaría con el contingente naval estadounidense rumbo a Gaza/Líbano como ayuda militar a Israel. El Gobierno de Sánchez acaba de enviar buques de guerra a la zona para apoyar a Israel y de firmar una declaración de apoyo al Gobierno de Netanyahu. De momento no hay declaración oficial.
Militante del FPLP detenida en Marsella
Detenida en Francia la doctora Mariam Abbu Daqqa en Marsella, que iba a dar unas charlas a lo largo del país, por orden del Ministerio del Interior francés. Desde Gaza, donde reside, piden ayuda. Pertenece al buró del FPLP, antigua combatiente de la resistencia palestina, y desde esta mañana se desconoce su paradero. Basta de censura y represión a las voces palestinas.
Llegó al Estado francés en septiembre para una gira por distintas ciudades francesas para explicar la situación en Gaza y la participación de las mujeres en la lucha del pueblo palestino.
«Israel» quiere saquear las riquezas de Gaza
El Estado de Israel no solo pretende expulsar a los palestinos, sino también saquear los yacimientos de gas y petróleo ubicados en la costa de Gaza, concediendo licencias a empresas como Genie Energy, que reúne al clan Rothschild, al criminal Cheney y al oligarca Rupert Murdoch.
Misiles de Hezbolá calan hondo: Israel evacua 28 poblados fronterizos
El ejército israelí se ha visto forzado a evacuar 28 comunidades a lo largo de la frontera de El Líbano por temor a los ataques con misiles de Hezbolá.
Mediante un comunicado emitido este lunes, el ejército israelí y el ministerio para asuntos militares del régimen han adelantado su plan para evacuar a los residentes de 28 poblados que están ubicados a 2 kilómetros (1,2 millas) de la frontera con el Líbano, según ha informado el diario local Haaretz.
La nota ha detallado que las 28 comunidades son: Adamit, Arab al – Aramshe, Avivim, Baram, Betzet, Dafna, Dishon, Dovev, Ghajar, Hanita, Kfar Giladi, Maayan Baruch, Malkia, Manara, Margaliot, Mattat, Metula, Misgav Am, Netua, Rosh Hanikra, Shlomi, Shomera, Shtula, Yaara, Yiftah, Yiron, Yuval y Zarit.
La decisión se toma después de que aumentara la tensión en la frontera libanesa con el intercambio de disparos entre el ejército israelí y el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) en los últimos días, lo que a su vez ha acrecentado el temor entre las autoridades israelíes de que se abra un segundo frente de batalla en el norte de los territorios ocupados.
El ejército israelí, que está implicado en un intenso combate con la Resistencia palestina en la Franja de Gaza desde el pasado 7 de octubre, cuando el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) lanzó la sorpresiva operación ‘Tormenta de Al – Aqsa’, ha sufrido varias bajas en sus filas por ataques con misiles lanzados por Hezbolá en el frente norte.
El movimiento libanés ha atacado varios cuarteles de las fuerzas israelíes, algunas bases militares, además de un número de tanques y carros blindados del ejército israelí en los últimos días. Un posible conflicto con Hezbolá sería una pesadilla para Israel, porque según estrategas militares, la Resistencia libanesa tiene en sus arsenales misiles suficientes para arrasar los territorios ocupados.
«La única democracia de Oriente Medio» bombardea la frontera con Egipto
Hace unas horas, las fuerzas del apartheid sionista volvieron a bombardear la frontera con Egipto en la ciudad de Rafah, con funcionarios del gobierno egipcio cerca de la explosión.
Hace unos instantes bombardearon el sur de Libano con fosforo y en estos momentos bombardean Damasco, en Siria [esto se escribe hacia las 21h38 de hoy 16 de octubre].
Los sionistas de nuevo han bombardeado cuatro paises en un solo dia y los medios siguen diciendo que ellos son los agredidos, el mundo al revés.
El Ministro de Exteriores de Egipto ha dicho que es imposible llevar ayuda humanitaria a Gaza si los sionistas no paran de bombardear la frontera.
Recordar que en Rafah es donde están yendo todos los refugiados palestinos después de que los sionistas les amenazaran con bombardearles si no se exiliaban de Gaza.
Hoy han bombardeado por segunda vez la frontera para evitar que entren camiones con ayuda humanitaria, asi es como se la gasta la llamada «unica democracia de Oriente Medio».
«Israel» y el terrorismo, consustanciales e inseparables
El terrorismo está presente en toda la historia del Estado de «Israel»: en su germinación, durante su creación y desde entonces, día a día, con especial agravamiento en los últimos años, desde que ese Estado viene siendo gobernado por los extremistas del Likud más una caterva de partidos ultraortodoxos, fascistas y filonazis, incrementando sus planes de liquidación de palestinos enemigos, con manga ancha para los colonos invasores, con robo de tierras a los campesinos sometidos y ataques armados a los países del entorno, singularmente Siria y Líbano.
Todo lo cual lo consiente, anima y respalda ese Occidente que, sea por los mitos bíblicos y la cultura dominante judeocristiana, sea por el inmenso poder del mundo de negocios judío, es corresponsable de crímenes innumerables desde 1948, con genocidios lentos y fulminantes, guerras de expansión e intimidación y, por supuesto, de un terrorismo permanente y racionalizado que tiene como principal víctima (pero no solo) al abandonado y depauperado pueblo palestino, al que se le descabeza eliminando sistemáticamente a sus líderes, para así aumentar la opresión y la humillación.
Para justificar sus exacciones y crímenes «Israel» cuenta, aparte de con los grandes medios de comunicación del mundo entero, con su bien afilada acusación de terroristas para sus enemigos y la no menos eficaz tacha de antisemitas para sus críticos. Los aspavientos de tanto necio desde las tribunas políticas y los medios de comunicación, y las condenas generalizadas por la última acción armada del grupo Hamás, están relacionados con esa historia de consentimiento y allanamiento de casi todo Occidente, política, economía, cultura, ante este Estado horrendo e injusto, agresivo y racista. Pero que ejerce un dominio aplastante sobre política e información, y consigue dárselas de pequeño Estado rodeado de enemigos (aunque dotado de la bomba atómica, que no consiente que ningún vecino posea), que sufre inexplicable e injustamente el rechazo de sus víctimas.
Por supuesto, que en gran medida, esa existencia política de un Estado cuya aparición ha marcado la mitad del siglo XX y lo que va de XXI con la más larga e impune saga de crímenes (Hitler y sus canalladas fueron cosa de un decenio, a fin de cuentas, y la historia y la literatura han hecho grandes esfuerzos por aliviar aquellos crímenes), la debe al apoyo indeclinable de Estados Unidos de América que, a la misma convicción (fanática) de «Israel» sobre su origen providencial, une su estricta dependencia de los lobbies judíos, que controlan lo esencial de su economía; y con su poder militar garantiza la permanencia de ese engendro político – internacional.
Siempre conviene hacer recordar la magistral creación de aquel Jehová que, eligiendo al pueblo hebreo de entre los numerosos pueblos descendientes de Adán y Eva, lo lanzó en pos de una tierra prometida y maravillosa, que disfrutaría de su protección por los siglos de los siglos; para lo que sería suficiente que ese pueblo elegido solo reconociera su divinidad de entre la idolatría de los demás pueblos de su entorno. Con muy escasa diferencia de nombres y adjetivos, así también se autodescriben y definen tanto el pueblo como el Estado norteamericanos, aunque en este caso ha de añadirse un cierto (aunque, evidente) complejo estadounidense por los éxitos bíblico – históricos y antiárabes de «Israel», que bien quisiera alcanzar; pero sin poder, todavía, igualar la trayectoria del pueblo hebreo – judío – israelí, tan claramente dirigida por la divinidad: revísese el relato bíblico, en especial el Pentateuco (la Torá) que, siendo redactado en el siglo VII a.C., para relatar de forma oportunista los once siglos que, dicen, mediaban desde Abraham (recogiendo una tradición oral ciertamente potente, vaya que sí), contiene los mitos de la más fantasiosa literatura mundial, y las más sangrientas promesas para el mundo (gentil y judío).
Así que, embebidos por esos mitos que secuestran a Occidente desde Abraham, nuestros políticos y comentaristas tienen claro que la operación de Hamás sobre el territorio israelí es terrorista y deleznable, y no tiene precedentes. Vaya, vaya. «Israel», sin embargo, ha sido sorprendido en su beatífico y democrático discurrir, y por eso se le otorga todo el derecho del mundo para responder con su furia bíblica, su odio al árabe y su inmenso poder destructor, ese que ya Jehová le garantizó bajo los cielos de Ur de Caldea, y que llevó a ese Pueblo Elegido a atacar a todos los pueblos del vecino Canaán, invadir sus territorios y apropiárselos, ya que vivían en la Tierra Prometida; todo ello tras guerras y emigraciones guiadas por su Dios, único y omnipotente. Cómo no recordar al valiente y piadoso David, en torno al año 1000 a.C., enfrentado a aquel Goliat, pérfido y atroz que, simplemente, defendía el derecho de los filisteos (filistín en árabe, es decir, palestinos) a su propia tierra. Vaya, vaya.
Nadie debe adherirse a ninguna acción armada, como principio, pero al pueblo palestino le asiste todo el derecho del mundo a hacer frente a la opresión sistemática, los crímenes sin cuento y el robo de la esperanza. Frente a «Israel», que practica y enseña el mandato bíblico del «ojo por ojo y diente por diente» desde que sus padres fundadores se dedicaran a masacrar aldeas palestinas y a desposeer a cientos de miles de seres humanos de sus tierras y derechos.
Cuando los medios internacionales espumean y babean glorificando a «Israel», es necesario que los disidentes de la ignominia recordemos que sobre «Israel» y sus fechorías la bibliografía es muy abundante, debiendo destacarse los análisis leales y éticos de una nada escasa intelectualidad judeo – israelí, que no ceja en la desmitificación de tanto cuento bíblico de la mano de la arqueología y la historia, como puede encontrarse en la biblia desenterrada (2011), de los prestigiosos arqueólogos Israel Finkelstein y Neil Asher Silberman; en el desvelamiento de una estrategia originaria y vigente de aniquilación del pueblo palestino, que documenta el valiente historiador Ilán Pappé en La cárcel más grande de la tierra. Una historia de los territorios ocupados (2018); o poniendo de relieve la imposición que el lobby israelí en Estados Unidos hace de los intereses del Estado judío sobre la propia política internacional de Washington, asunto del mayor interés que los politólogos John J. Mearsheimer y Stephen M. Walt desmenuzan en El Lobby israelí y la política exterior de Estados Unidos (2007). Para salir de la órbita propagandística de «Israel», tan potente y profusa, no hay más remedio que leer e informarse, y contrarrestar así la basura cotidiana con que hieden nuestros grandes medios de comunicación
Álcese el crítico – analista por sobre las mentiras y los mitos de «Israel» y la indecencia de este Occidente que lo arropa sin pudor ni dignidad, y señale con dureza (ya que sobran los fundamentos) los crímenes y humillaciones insoportables de ese Estado sobre los árabes palestinos y tantos ciudadanos del Próximo Oriente. Descrea de las afirmaciones que, cada poco, destacan la democracia israelí (¡puaf!) de entre tanto régimen árabe autoritario, y no disculpe a esos tipos que no dudan, tras cada acción de la resistencia palestina, en calificarla de terrorista, y en ignorar, con tan alto grado de comprensión, las canalladas sistemáticas de un Estado ilegítimo e implacable.
Del despliegue de estos días, de sentidas adhesiones a «Israel» por parte de políticos y analistas, tras la «condena sin paliativos» de las acciones de Hamás, destaco la protesta de cientos de parlamentarios en la entrada del Parlamento Europeo, al modo borreguil, cosa que nunca han hecho para protestar contra «Israel». Faltaba, claro, la minoría que, siendo crítica con esa potencia ultra, ha optado por callarse y dejar pasar la oportunidad de alzarse contra el espectáculo e iluminar con algo de dignidad a tan prestigioso pesebre. Que es verdad que la larga mano de «Israel» no solo asesina a sus enemigos militantes, sino que también alcanza a arruinar la vida y carrera de políticos adversos. Pero todos ellos –hipócritas o cobardes– conocen muy bien a los verdaderos terroristas, ya que saben lo que fue la Nakba, lo que es en realidad la ocupación de Cisjordania y a qué se dedican esos sanguinarios colonos que trituran el espacio palestino. Las acciones palestinas desde 1948 han sido siempre superadas –en horror e impunidad– por la temible fuerza militar del Estado hebreo.
Por su parte, Blinken y Austin, secretarios de Estado y de Defensa norteamericanos han volado en auxilio de sus compinches, como carneros – guías del gran rebaño de «Israel», para anunciar el envío de más armas (como si a «Israel» le hicieran falta) y aniquilar pronto al enemigo común, transmitiendo el mensaje (innecesario, bien conocido) de su presidente, Biden, a quien le faltó tiempo para declarar que Estados Unidos está indefectiblemente del lado de «Israel». «Y punto», dijo ese vejestorio con las manos manchadas de sangre, cerrando sus ojillos y encomendando al común Dios de sus Ejércitos –que no luchan, sino que masacran y oprimen– los futuros éxitos de «Israel»» y los suyos propios.
Unos y otros se regodean informando de los preparativos para la invasión de Gaza, enésima de «Israel», pero en la que se empleará con más salvajismo que nunca, proporcional a la humillación sufrida por un ataque sorpresivo; y llevando a la destrucción –según su método, tan practicado– a diez veces o más víctimas palestinas que las israelíes ocasionadas por Hamás, de las que no menos de un cuarto serán menores de edad. A esto también Occidente está acostumbrado, reconociendo el derecho de «Israel» a defenderse y sugiriéndole una «respuesta proporcionada», como si ignoraran que esto no figura en el léxico ni en la experiencia de Israel
Occidente debiera vomitar sobre sí mismo y sus cacareados valores, políticos y morales en particular, por permitir que el pueblo palestino sufra –cien años ya, como quien dice– los crímenes de ese sionismo estatal al que mima: una mezcla de tipos enloquecidos por las promesas de ser el Pueblo Elegido por un Dios a su medida; y avergonzarse por la condena, cínica y canallesca, que lanza contra esos pocos que se atreven a desafiar al Estado de Israel, ese triunfante enemigo de la Humanidad.
Pedro Costa Morata
Y para acabar el día
El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Amir Abdollahian ha dicho que: «En las próximas horas, existe una posibilidad real de acción preventiva por parte del eje de la resistencia».
Noticias y textos recogido por Boltxe de varias webs y tuits: https://electronicintifada.net/, https://espanol.almayadeen.ne, https://french.almanar.com.lb/ y @DaniMayakovski
16 de octubre de 2023