En una medida peligrosa que refleja un sesgo flagrante hacia las mentiras y los planes de la ocupación, el Comisionado General de la UNRWA, Philippe Lazzarini, emitió una decisión de despedir a nueve empleados de la agencia bajo el pretexto de su presunta complicidad en los eventos del 7 de octubre.
Consideramos que esta decisión no solo es una flagrante violación de los derechos de estos empleados agraviados, sino también una luz verde para que la ocupación sionista lleve a cabo sus planes agresivos contra la UNRWA y el pueblo palestino.
Esta decisión injusta encarna la flagrante parcialidad del Comisionado General hacia las mentiras y los planes de la ocupación y demuestra su disposición a ofrecer a la agencia como chivo expiatorio para apaciguar las ambiciones sionistas, en un intento de legitimar cualquier medida agresiva que pueda adoptarse contra la UNRWA y su personal.
A la luz de esta peligrosa decisión, no podemos quedarnos de brazos cruzados ante esta farsa, que ignora los principios más básicos de la justicia internacional y en la que está claro que la acusación fue «probada» antes de que se llevara a cabo la investigación, en flagrante violación de las leyes internacionales.
Esta medida ignora los resultados de investigaciones independientes, que confirmaron la falsedad de las acusaciones contra los empleados y demostraron su falta de pruebas creíbles, hallazgos reconocidos por el Secretario General de la ONU, lo que llevó a muchos países a revertir su decisión de suspender la financiación a la agencia.
El despido de estos empleados es un resultado directo de las presiones de la ocupación y forma parte de una conspiración más amplia destinada a socavar la labor de la UNRWA, vaciándola de su contenido humanitario y legal o reduciendo gradualmente sus servicios como un paso sistemático hacia la liquidación de la UNRWA y la cuestión de los refugiados.
La declaración del Comisionado General no es más que una clara parcialidad hacia los programas de la ocupación y una justificación expuesta para cualquier acción que pueda tomarse contra la UNRWA en el futuro.
Por lo tanto, pedimos la revocación inmediata de esta decisión injusta y peligrosa, y exigimos a la comunidad internacional y a las Naciones Unidas que tomen medidas inmediatas para detener esta farsa que amenaza el futuro de la UNRWA y su papel en el apoyo a los derechos de los refugiados palestinos. Esta decisión también viola los derechos básicos de los empleados, ataca su dignidad y los etiqueta falsa y maliciosamente como «terroristas» bajo la incitación de la ocupación y sus cómplices.
Frente Popular para la Liberación de Palestina
Departamento de Asuntos de Refugiados y Derecho al Retorno
9 de agosto de 2024
Fuente: https://t.me/saifquds/12568