Has­san Nas­ra­llah: «El fren­te liba­nés no se deten­drá has­ta que cese la agre­sión a Gaza»

  • Agra­dez­co al Gobierno y al depar­ta­men­to médi­co del Líbano por sus serios esfuer­zos, y a todos los que dona­ron san­gre en varias regio­nes del Líbano, así como a aque­llos que toma­ron la ini­cia­ti­va de trans­por­tar a una per­so­na heri­da y anun­cia­ron su dis­po­si­ción a donar sus órga­nos a los heridos.
  • Quie­ro expre­sar mi agra­de­ci­mien­to a nues­tra bue­na gen­te y a nues­tros que­ri­dos pue­blos de todas las regio­nes y a los diri­gen­tes polí­ti­cos y sin­di­ca­les que se soli­da­ri­za­ron con noso­tros. Una de las ben­di­cio­nes de lo ocu­rri­do es la gran epo­pe­ya huma­ni­ta­ria y moral que pre­sen­cia­mos, sin pre­ce­den­tes a nivel nacio­nal y humanitario.
  • Exten­de­mos nues­tro agra­de­ci­mien­to a los paí­ses que toma­ron la ini­cia­ti­va de apo­yar al Líbano: Irak, Irán, Siria y todos los paí­ses que se comu­ni­ca­ron con el gobierno liba­nés y anun­cia­ron su dis­po­si­ción a apoyar.
  • El enemi­go uti­li­zó un dis­po­si­ti­vo civil que uti­li­zan amplios sec­to­res de la socie­dad y repi­tió el miér­co­les deto­nan­do dis­po­si­ti­vos de comu­ni­ca­ción inalám­bri­ca, sin impor­tar quién los lle­va­ra. Como resul­ta­do de esta agre­sión, murie­ron dece­nas de már­ti­res, entre ellos niños, muje­res y civiles.
  • Algu­nas explo­sio­nes tuvie­ron lugar en hos­pi­ta­les, mer­ca­dos, vías públi­cas, vivien­das y luga­res pobla­dos prin­ci­pal­men­te por civiles.
  • A lo lar­go de dos días, mar­tes y miér­co­les, en tan solo un momen­to, el enemi­go pre­ten­día matar no menos de 5.000 per­so­nas en dos minutos.
  • El esfuer­zo humano y el entu­sias­mo demos­tra­do por la gen­te con­tri­bu­ye­ron a redu­cir las lesio­nes graves.
  • Hemos crea­do comi­tés de inves­ti­ga­ción téc­ni­cos y de segu­ri­dad y esta­mos estu­dian­do todas las posi­bi­li­da­des. Hemos lle­ga­do a una con­clu­sión casi com­ple­ta, pero el caso toda­vía está sien­do inves­ti­ga­do y segui­do cui­da­do­sa­men­te, des­de la pro­duc­ción has­ta la dis­tri­bu­ción y los pro­ce­di­mien­tos en el Líbano. Lle­ga­re­mos a resul­ta­dos defi­ni­ti­vos sobre las explo­sio­nes en bre­ve y se toma­rán las medi­das ade­cua­das en consecuencia.
  • No hay duda de que hemos sufri­do un duro gol­pe, tan­to en tér­mi­nos de segu­ri­dad como de huma­ni­dad, sin pre­ce­den­tes en la his­to­ria de la Resis­ten­cia en el Líbano, y tam­bién sin pre­ce­den­tes en el Líbano, en el con­flic­to con el enemi­go sio­nis­ta, y a esca­la mundial.
  • Lo que ocu­rrió fue una gran ope­ra­ción terro­ris­ta y defi­ni­re­mos los acon­te­ci­mien­tos del mar­tes y miér­co­les como masacres.
  • Este gol­pe sig­ni­fi­ca­ti­vo y pode­ro­so no nos derri­bó ni nos derribará.
  • Esta es la natu­ra­le­za de la gue­rra y del con­flic­to. Sabe­mos que nues­tro enemi­go tie­ne supe­rio­ri­dad tec­no­ló­gi­ca por­que Occi­den­te lo res­pal­da. Cuan­do nos invo­lu­cra­mos en este con­flic­to, depen­de­mos del esfuer­zo, los sacri­fi­cios, el des­gas­te y la acu­mu­la­ción de ganan­cias para ganar. La gue­rra es un ciclo: un día para noso­tros con­tra nues­tro enemi­go y otro día para nues­tro enemi­go con­tra nosotros.
  • El mar­tes y el miér­co­les fue­ron una gran prue­ba para noso­tros y, si Dios quie­re, supe­ra­re­mos esta prue­ba con orgu­llo. Yo digo que este duro gol­pe no nos derrum­ba­rá. A tra­vés de esta expe­rien­cia y sus lec­cio­nes, nos vol­ve­re­mos más fuer­tes, más fir­mes y más capa­ces de enfren­tar todas las posi­bi­li­da­des y peligros.
  • Un exje­fe adjun­to del Esta­do Mayor israe­lí des­cri­bió lo que está suce­dien­do en el nor­te como una derro­ta his­tó­ri­ca para Israel.
  • El fren­te liba­nés es un fren­te de fuer­te pre­sión y una de las mone­das de cam­bio más impor­tan­tes que tie­ne hoy la Resis­ten­cia pales­ti­na para lograr sus obje­ti­vos y dete­ner la agresión.
  • El enemi­go inten­tó sepa­rar el fren­te liba­nés del fren­te de Gaza y ame­na­zó con una gue­rra. Todo esto tie­ne como obje­ti­vo pre­sio­nar al Esta­do liba­nés, al pue­blo liba­nés y a la Resis­ten­cia en el Líbano para que deten­gan este fren­te. Las masa­cres del mar­tes y miér­co­les fue­ron par­te de la pre­sión para dete­ner el frente.
  • Todos los inten­tos del enemi­go fra­ca­sa­ron y la Resis­ten­cia se man­tu­vo fir­me en su posi­ción, por lo que el enemi­go recu­rrió a este méto­do, que es el nivel más alto de criminalidad.
  • Des­pués de la masa­cre del mar­tes, reci­bi­mos men­sa­jes de que el obje­ti­vo de este ata­que era que dejá­ra­mos de luchar en el fren­te liba­nés, y si no para­mos, ellos tie­nen más para desatar.
  • Otro obje­ti­vo del enemi­go es minar la base de apo­yo, des­gas­tar­la, ago­tar­la y hacer­la gri­tar que la Resis­ten­cia debe detenerse.
  • Nues­tra res­pues­ta, en nom­bre de los már­ti­res y los heri­dos, en nom­bre de los que per­die­ron sus ojos y manos, y en nom­bre de todos los que asu­mie­ron este deber reli­gio­so y moral de apo­yar a Gaza, que sufre ham­bre, es esta: a Netan­yahu y Gallant, el fren­te liba­nés no se deten­drá has­ta que cese la agre­sión a Gaza.
  • Cua­les­quie­ra que sean los sacri­fi­cios, las con­se­cuen­cias, las posi­bi­li­da­des y el futu­ro de la región, la Resis­ten­cia en el Líbano no deja­rá de apo­yar y estar al lado del pue­blo de Gaza: esta es la pri­me­ra respuesta.
  • Las decla­ra­cio­nes de los pro­pios heri­dos refle­jan su moral, su gran pacien­cia y su deter­mi­na­ción de regre­sar al cam­po de bata­lla: esta es otra res­pues­ta al enemigo.
  • El obje­ti­vo del enemi­go con estos bom­bar­deos gene­ra­li­za­dos era debi­li­tar el entorno de la Resis­ten­cia, ago­tar­la y hacer­la gri­tar «¡bas­ta!» a la direc­ción de la Resis­ten­cia. Este obje­ti­vo tam­bién fue frus­tra­do el mar­tes y el miércoles.
  • El enemi­go tam­bién pre­ten­día, median­te las masa­cres del mar­tes y el miér­co­les, soca­var la estruc­tu­ra y el sis­te­ma de man­do y con­trol, y sem­brar con­fu­sión y debi­li­dad en el seno de la cúpu­la de Hiz­bu­llah. Esto no suce­dió en nin­gún momento.
  • La estruc­tu­ra de la Resis­ten­cia no ha sido sacu­di­da ni perturbada.
  • El enemi­go debe enten­der que lo ocu­rri­do no afec­tó nues­tra estruc­tu­ra, volun­tad, sis­te­ma de man­do y con­trol ni nues­tra pre­sen­cia en el fren­te; más bien, nos hará más fuer­tes y más presentes.
  • Acep­ta­mos este desa­fío el 8 de octu­bre y hoy lo acep­ta­mos de nue­vo. Le digo a Netan­yahu y a la enti­dad sio­nis­ta: no podrán hacer que los colo­nos del nor­te regre­sen al nor­te, hagan lo que quie­ran. Si quie­ren que los colo­nos regre­sen, la úni­ca mane­ra es dete­ner la agre­sión a Gaza.
  • En las últi­mas sema­nas se ha habla­do en la enti­dad sio­nis­ta de tras­la­dar el foco hacia el nor­te, con el obje­ti­vo de que «los resi­den­tes del nor­te regre­sen al nor­te de for­ma segura».
  • Le digo a Netan­yahu: no podrás hacer que los «resi­den­tes del nor­te regre­sen al nor­te». Haz lo que quie­ras. Este es un gran desa­fío entre noso­tros y tú, y la úni­ca mane­ra de lograr tu obje­ti­vo es dete­ner la gue­rra en Gaza. Nin­gu­na esca­la­da mili­tar, nin­gu­na matan­za, nin­gún ase­si­na­to, ni siquie­ra una gue­rra a gran esca­la pue­de hacer que los colo­nos regre­sen a las fronteras.
  • El coman­dan­te de la región nor­te pro­pu­so crear un cin­tu­rón de segu­ri­dad den­tro de las tie­rras liba­ne­sas. Le digo que lo aco­ge­mos con agra­do por­que sus sol­da­dos (aho­ra en sue­lo de la ocu­pa­da Pales­ti­na) están fuer­te­men­te for­ti­fi­ca­dos y toman muchas pre­cau­cio­nes. Bus­ca­mos sol­da­dos y carros de com­ba­te sio­nis­tas para ata­car­los con lin­ter­nas y mechas, día y noche (y no es fácil encon­trar­los), pero si deci­den venir ellos mis­mos, les deci­mos: «Bien­ve­ni­dos».
  • El cin­tu­rón de segu­ri­dad (que el coman­dan­te de la región nor­te del Ejér­ci­to sio­nis­ta pre­ten­de esta­ble­cer en terri­to­rio liba­nés) se con­ver­ti­rá en un infierno para vues­tro ejér­ci­to si deci­dís venir a nues­tra tie­rra. Os enfren­ta­réis a cien­tos de los que resul­ta­ron heri­dos el mar­tes y el miér­co­les, que se han vuel­to aún más decididos.
  • Lo que están a pun­to de hacer des­pla­za­rá aún más a quie­nes huyen del nor­te y anu­la­rá cual­quier posi­bi­li­dad de que regre­sen. Lo que el enemi­go con­si­de­ra una ame­na­za hacia noso­tros, noso­tros lo con­si­de­ra­mos una opor­tu­ni­dad his­tó­ri­ca y la aco­ge­mos con agrado.
  • No hay duda de que la agre­sión ocu­rri­da es masi­va y sin pre­ce­den­tes, y será res­pon­di­da con seve­ra retri­bu­ción y jus­to cas­ti­go, de don­de lo espe­ren o no lo esperen.
  • En cuan­to a la seve­ra retri­bu­ción, la noti­cia está en lo que verás, no en lo que oirás, y lo man­te­ne­mos en el círcu­lo más estricto.
  • El lide­raz­go ton­to, nar­ci­sis­ta e impru­den­te del enemi­go con­du­ci­rá a esta enti­dad al abismo.

Dis­cur­so rea­li­za­do el 19 de sep­tiem­bre de 2024

Fuen­te: https://t.me/saifquds/14061, https://t.me/saifquds/14062https://t.me/saifquds/14063

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *