Por medio de este escrito el Movimiento Pro Amnistía y Contra la Represión quiere hacer una breve valoración sobre el encarcelamiento de Itxaso Zaldua, así como de la detención de un hombre acusado de realizar pintadas en la Peña Oberena a favor de Patxi Ruiz.
Estos dos sucesos represivos, valorado cada uno en su medida y su gravedad, demuestran que los Estados español y francés siguen inmersos en una guerra contra Euskal Herria y su clase trabajadora. Nuestro movimiento denuncia de igual manera las acciones represivas “duras” y las “blandas”, pero a la hora de analizar hasta dónde va la actitud de los Estados es importante destacar que en cada uno de estos casos han tomado siempre la opción más dura que podían tomar.
En el caso de Itxaso Zaldua, en vez de tomar medidas de control, el juez fascista Santiago Pedraz ha preferido meterla en la cárcel aceptando la petición de la fiscalía. No ha tomado en cuenta el contexto (que Zaldua estaba trabajando, que es madre o que ETA ya no existe) a la hora de tomar la medida más dura en su contra.
En el caso del hombre detenido acusado de realizar la pintada a favor de Patxi Ruiz podemos decir lo mismo: en vez de entregarle una citación para el juzgado, han preferido detenerlo, también en esta ocasión tomando la medida más dura que se podía tomar.
En Euskal Herria no hay paz, porque los que vinieron a hacer la guerra la siguen haciendo, porque la falta de respuesta revolucionaria no es paz. Precisamente esta falta de respuesta estabiliza la ausencia de paz, porque facilita la represión y porque se basa en la aceptación de la vulneración sistemática de la libertad. Las decisiones represivas adoptadas por los Estados español y francés en los últimos tiempos dejan al descubierto que su objetivo no es únicamente terminar con la respuesta revolucionaria, sino hacer desaparecer hasta la última semilla que ideológicamente se oponga a su sistema capitalista y a su modelo imperialista.
Le corresponde al Pueblo Trabajador Vasco no aceptar esta asimilación que por la fuerza intentan imponernos y sembrar continuamente las semillas ideológicas para dar la vuelta a la situación, tanto a nivel teórico como práctico. Por medio de la defensa de la amnistía, de la organización y de la lucha conseguiremos nuestros objetivos.
En Euskal Herria, a 22 de julio de 2020.
Movimiento Pro Amnistía y Contra la Represión.