Conscientes de lo que representaba la OTAN, hace 38 años, un 12 de marzo, Euskal Herria, junto con Catalunya y Canarias dijo NO a la OTAN en el Referéndum de 1986. Hoy, tenemos tantas o más razones que entonces para condenar y rechazar la OTAN, el imperialismo norteamericano y sus lacayos, la Unión Europea y el sionismo de Israel.
Ya desde la Segunda Guerra Mundial, la historia del imperialismo ha sido una historia de constantes golpes de Estado en todos los continentes (América Latina, África, Asia, Oriente Medio…), de matanzas en guerras contrainsurreccionales (Nicaragua, Uruguay…), de guerras contra el movimiento descolonizador (Vietnam, Laos, Corea, Argelia, Congo, Kenia…), de supuestas «revoluciones» de colores (Serbia, Georgia, Ucrania, Líbano…), la «guerra contra el terror» tras el 11‑S (Afganistan, Irak…), guerras con utilización del terrorismo islámico (Al Qaeda, ISIS…) como armas de control y dominio (Afganistán, Asia Central, Cáucaso, Siria, Libia, Irak, Asia, África…).
La OTAN es un instrumento militar y político del imperialismo, que desde su creación en abril de 1949, ha sido utilizado para controlar Europa, para controlar la Unión Europea –a quien ha convertido en su siervo fiel – , para hacer frente a la URSS, ahora a Rusia, y a China y como instrumento complementario de dominación del mundo, tarea a la que dedica grandes recursos económicos y armamentísticos, atómicos especialmente, y numerosas bases militares. Ha jugado un importante papel en el desmantelamiento de Yugoslavia, en la guerra contra Libia, contra Siria, contra Yemen, contra Irak, en la guerra contra Rusia en Ucrania, en la guerra de acoso a Irán y a China, y también en la guerra contra Palestina en alianza con Israel. Y cumple también, quizá especialmente en Europa, un papel de gendarme defensor del orden burgués e imperialista, lo cual nos afecta directamente a Euskal Herria.
Las guerras de Ucrania y Palestina son paradigmáticas de la actuación del imperialismo y de la OTAN. En el caso de Ucrania, una guerra propiciada por la OTAN con su política de acoso a Rusia mediante la expansión de la OTAN hacia el Este, pasando de 16 miembros a 31 en este momento, utilizando a Ucrania, tras el golpe de Estado del Maidan de febrero de 2014, organizado por la OTAN con el apoyo del nazismo europeo, como plataforma de una prevista guerra atómica y bacteriológica contra Rusia primero, y luego quizá contra China, liquidando al mismo tiempo toda la cultura y población rusa de Ucrania (Donbass). Una guerra en la que se han volcado la OTAN y la Unión Europea, con una enorme financiación y gran cantidad de armamento, con doce rondas de sanciones contra Rusia, con la pretensión de llevar a este país a la ruina y romper las relaciones de la Unión Europea con el mismo, pero que lo que ha traído ha sido una gran crisis económica de la Europa occidental en perjuicio de los trabajadores y la población.
En el caso de Palestina, con la partición de Palestina por la ONU en 1947, primero, y luego la toma de posesión del poder político por el sionismo en 1948 se iniciará un proceso para convertir lo que será Israel, en una punta de lanza del imperialismo en el Medio Oriente. La consiguiente guerra de 1948 – 1949 contra el régimen usurpador de Israel por parte de países árabes, que perdieron la guerra supuso el gran éxodo de palestinos al exilio (700.000), la Nakba. A partir de ahí, se va a producir un proceso, intercalado por varias guerras contra los países árabes vecinos, en el que se irá produciendo un robo constante de las tierras palestinas a favor de colonos, la segregación masiva de la población en guetos, como el de Cisjordania franqueado por muros, carreteras inaccesibles o controles, o el gran campo de concentración de Gaza, la privación de sus derechos sociales y políticos y de las necesidades más básicas, asi como el constante acoso, persecución, detenciones arbitrarias, asesinatos y torturas, hasta llegar al auténtico genocidio al que hemos llegado hoy en día, y la prohibición de la vuelta de los exiliados. De manera que no cabe más solución que la disolución del ente sionista de Israel y la descolonización integral de Palestina, asi como la recuperación por los palestinos de sus tierras desde el río Jordan hasta el mar, la creación de un único Estado palestino y la vuelta de los exiliados.
Es de mencionar que la OTAN también asienta sus garras en Euskal Herria. Desde el Polígono de tiro de las Bárdenas, pasando por la producción y exportación de armas a países y organizaciones criminales como la OTAN, a la contribución vía impuestos y subvenciones al gasto en armas, y al papel de empresas, bancas, universidades, instituciones políticas y otras en la política armamentística y criminal, a favor de la OTAN, del sionismo y sus guerras imperialistas.
Y es de mencionar también la lucha que están desarrollando sectores cada vez más importantes de Euskal Herria, de Europa y otros países en contra del imperialismo y del sionismo, la lucha que están llevando las organizaciones y los países llamados del Eje de la Resistencia, aliados de Palestina, como son Hezbola, Iran, Siria, los hutíes de Yemen, los grupos populares antiimperialistas de Irak, así como muchos países que se están coordinando para defender su soberanía y enfrentarse al imperialismo hegemonista y criminal.
Ni como pueblo oprimido ni como clase trabajadora tenemos futuro dentro de la OTAN y la Unión Europea.
¡Libertad para Euskal Herria!
OTAN ETA UE/EB KANPORA!
Por todo ello llamamos a una concentración el sábado 9 de marzo a las 13h en el Arriaga de Bilbao.
OTAN EZ PLATAFORMA
24 de febrero de 2024