Finalmente el Movimiento Renovador Sandinista (MRS) decidió quitarse la máscara y apoyar abiertamente, con nombre y apellido, la candidatura de Eduardo Montealegre y la Alianza PLC-VCE en las elecciones del próximo 9 de noviembre.
En los días pasados, la directiva del MRS convocó a la asamblea del partido y decidió orientar el voto de sus electores contra cualquier candidato del FSLN en todo el país, sin tener el valor de aclarar que esa decisión iba a significar avalar el voto en la Casilla 1, es decir para los candidatos del ex presidente Arnoldo Alemán.
El único que demostró claramente estar de acuerdo con apoyar a Eduardo Montealegre, ex banquero y ministro del Exterior, de la Presidencia y de Hacienda durante los gobiernos de Arnoldo Alemán y Enrique Bolaños, y actualmente enjuiciado por el tristemente famoso caso de los CENIs, fue el coordinador del MRS, Edmundo Jarquín. Ahora parece que esta actitud dio los resultados esperados en el partido.
En medio de la algarabía en la que se mezclaron las banderas anaranjadas del MRS, las rojas del Partido Liberal Constitucionalista (PLC) y del Movimiento Vamos con Eduardo (VCE) y las verdes del Partido Conservador (PC), decenas de militantes recibieron con gritas de jubilo y consignas al nuevo líder de esta anómala, y hasta hace poco inimaginable, alianza.
En 1990 alrededor de 15 partidos se habían reunido en la Unión Nacional Opositora (UNO), para enfrentar y derrotar en las urnas al gobierno sandinista de Daniel Ortega, presentando como alternativa a la moderada Violeta Barrios de Chamorro, viuda del periodista mártir Pedro Joaquín Chamorro.
Sin embargo, lo que pasó hace pocos días fue algo muy diferente y los militantes y simpatizantes del MRS tendrán que taparse la nariz y tendrán que hacerlo muy bien, apretando muy fuerte, cuando decidirán dar sus votos a uno de los representantes más destacados de esa clase «criolla», que arrasó con el país en los últimos 16 años, que se recicló en la política gracias al ex presidente Alemán, para después desconocerlo, traicionarlo y volverlo a abrazar para tener otra oportunidad electoral, después de la derrota en la presidenciales del 2006.
«Eduardo, Eduardo», gritaban decenas de militantes del MRS mezclados con liberales y conservadores, todos contra Ortega.
«Estamos convencidos de que el orteguismo se ha convertido en una deformación del sandinismo, así como en los años 70 el somozismo fue una deformación del liberalismo», dijo Victor Hugo Tinoco, dirigente del MRS.
«Ante las persecuciones contra las ONG, los periodistas y otras personas en el país, hemos decidido que para nosotros la prioridad es frenar la dictadura ¡ahora! Ahora que tenemos todavía la oportunidad de hacerlo de manera pacífica en las elecciones del 9 noviembre. Eso quiere decir impedir que en Managua la pareja Ortega-Murillo tome el control de la alcaldía y la convierta en un centro de represión. Es por eso – concluyó Tinoco – tenemos que votar en contra de los candidatos de la dictadura y hemos decidido apoyar en Managua a la formula que tiene la posibilidad de frenar a la dictadura».
Aunque sin tener el valor de nombrarlos, fue más que claro que el ex canciller de Nicaragua en los años 80, se refería al candidato de la derecha liberal, Eduardo Montealegre y a su formula, el nostálgico del somozismo Enrique Quiñónez.
Para la ex comandante guerrillera y personaje histórico de la lucha contra la dictadura de los Somoza, Dora María Téllez, quien terminando la actividad abrazó calurosamente al candidato liberal, no existen otras soluciones que la de votar para los candidatos de la derecha nicaragüense. «Estamos aquí el día de hoy para expresar nuestro respaldo unilateral a Eduardo Montealegre como candidato a la alcaldía de Managua y lo hacemos sin pedir nada a cambio, sino como un acto patriótico. No lo estamos haciendo por debajo de la mesa, ni lanzamos la piedra y escondemos la mano, sino que lo hacemos claramente y estamos diciendo a nuestros electores que hay que votar contra Ortega.
Pero esto – continuó Téllez – no significa que lo estamos apoyando sin decirle qué es lo que queremos de su administración. De Eduardo y los demás candidatos que estamos apoyando en los diferentes municipios del país esperamos una gestión democrática, firme contra el pacto y la dictadura, una administración transparente y sin corrupción, una administración que permita la participación de los ciudadanos y a favor de los más pobres».
Sin embargo, a la ex comandante guerrillera se le olvidó explicar como va a ser posible que estos candidatos luchen contra el pacto entre FSLN e PLC, que en su momento vio la participación directa del MRS cuando ese partido formaba parte de la Convergencia Nacional entre 2003 y 2005, si la mayoría de ellos son candidatos de la Alianza PLC-VCE y fueron escogidos por el mismo Arnoldo Alemán.
Mucho más contundente la posición de Edmundo Jarquín, coordinador del MRS y, aparentemente, verdadero promotor de esta decisión asumida por el partido que representa, quien después de agradecer a Montealegre por su presencia y por sus promesas de campaña, dijo a los medios presentes que «en los días pasados se dijo que esta decisión era sólo personal, mientras que el día de hoy queda claro a todo el mundo que es una decisión unánime de toda la dirigencia del MRS. En este momento – continuó Jarquín – la cosa más importante es la defensa de la democracia y lo que se está diciendo en los medios de comunicación del orteguismo, que existe un conflicto entre revolución y contrarrevolución, entre derecha e izquierda, es falso porque no hay una revolución y el gobierno de Ortega no es de izquierda. Lo que existe en este momento es un conflicto entre dictadura y democracia», concluyó.
Hay que esperar unos días más para ver cuantos electores potenciales del MRS estarán dispuestos a digerir esta pastilla amarga y la deriva de su partido.
A sólo diez días del voto, los habitantes de Managua se encuentran en una disyuntiva de no fácil solución. Por un lado el candidato del FSLN, el ex campeón mundial de boxeo Alexis Arguello, con el cual el gobierno Ortega apunta a controlar de forma más tranquila y segura la alcaldía de la capital, sin recaer en los conflictos ocurridos en el pasado con los últimos dos alcaldes (Herty Lewites e Dionisio Marenco), por el otro el candidato de la derecha liberal, quien ahora goza del apoyo incondicional del MRS y de los conservadores, y que aparentemente está a punto de ser sacrificado por el ex presidente Alemán. Una segunda derrota electoral significaría para Montealegre la muerte política y estar a un paso del enjuiciamiento por el caso de los CENIs.
Hay también una tercer opción. El Movimiento por el Rescate del Sandinismo (MPRS) de Mónica Baltodano, criticó abiertamente y fuertemente la decisión del MRS y rompió la alianza que se había conformado en el 2006 y ahora pide a los electores votar contra el pacto Alemán-Ortega a través del voto nulo.
Testo e Foto Giorgio Trucchi – Lista Informativa «Nicaragua y más» di Associazione Italia-Nicaragua – www.nicaraguaymas.blogspot.com e www.itanica.org
