A lo largo y ancho de toda Euskal Herria, se ha recordado el 27 de septiembre, fecha en que el fascismo español asesinó a Txiki y a Otaegi y a otros tres revolucionarios españoles.
Por la mañana y sin los incidentes de hace dos años se ha recordado en el cementerio de Zarautz a Txiki. Txiki fue fusilado en Cerdanyola. Recordemos que justo hace dos años, un juez español prohibió el acto y envió a la policía autónoma que protagonizó varios altercados.
El pasado domingo unas 80 personas se reunieron en Azpeitia para recordar a Otaegi, el otro militante vasco fusilado aquel 27 de setiembre.
Ya por la tarde, un buen grupo de personas se han reunido en el cementerio de Derio en Bizkaia, donde el franquismo solía fusilar a las personas condenadas. Martxelo de Ahaztuak ha remarcado que estamos ante un autentico genocidio, que no debe olvidarse. Ha remarcado que estas personas lucharon de la manera que consideraron conveniente contra un régimen, el fascista español, regimen dictatorial y sangriento y según Ahaztuak ante estas situaciones (la de dictadura fascista), cualquier forma de lucha debe considerarse legítima.
Han sido numerosos los actos que se han celebrado a lo largo de la geografía vasca, recordando la fecha. A modo de ejemplo, Boltxe ha estado en el acto de Lezama, pequeño pueblo bizkaitarra, donde se ha recordado a las personas fallecidas a lo largo de estos años.
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