Este es el resumen de la actividad represiva de junio y julio. Con total seguridad no saldrán todos los hechos represivos, y menos si tenemos en cuenta que estos son casos llevados a cabo por las instituciones.
Y es que los estados extienden la represión a todos los ámbitos de nuestra vida. A través de los medios de comunicación y del sistema educativo nos preparan para que aceptemos su opresión y represión de la manera más dócil posible. Buscan que no seamos otra cosa que máquinas de producir para que unos pocos se llenen los bolsillos. Sin derechos, con unos sueldos que cada vez nos acercan más a la esclavitud. Trabajando pero pobres, o sin trabajo pero buscándolo… para seguir pobres.
La represión no viene siempre de parte de hombres armados, aunque los hombres ( y mujeres) armados sean el garante de todo tipo de represión. La represión también viene del supuesto intelectual que mientras defiende la universalidad de los idiomas español y francés ataca al euskera. Viene de debajo de una sotana, o de cualquiera que acepte los valores sociales, religiosos o económicos de este sistema, ya sea la pareja que te asesina, el vecino que te vigila desde el balcón, el nazi que sale de “caza” o el cipayo majo de tu cuadrilla.
Está claro que en Euskal Herria nos urge crear herramientas para hacer frente a la represión, sobre todo a la vista de que aunque nos querían asimilados y asimiladas, aquí perduran las ganas de luchar.
En este resumen aparece la referencia a los modernos sistemas de identificación que el Estado Español quiere aprobar. Quieren cambiar la ley, precisamente lo mismo que quiere hacer el Estado Francés. Buscan un control político y social más severo. Lo que en otra época se consideraba una distopía y la sociedad tomaba como una dictadura, actualmente tiene gran aceptación gracias al trabajo de esos medios de comunicación que antes mencionábamos.
Por orden de Garzón, en el primer lustro de este siglo detuvieron, torturaron y encarcelaron a decenas de militantes. También preventivamente cerraron cinco medios de comunicación. Y preventivamente están almacenando la parte más íntima de nuestro ser.
Los estados siguen en guerra, contra nuestra clase y a favor de la asimilación nacional. Ante eso nos toca organizarnos. Errepresioaren aurrean Tinko!